Ante el notable incremento de fenómenos naturales, Puerto Rico ha experimentado un aumento significativo en el uso de sistemas de energía renovable, especialmente en la instalación de sistemas de energía solar y baterías de almacenamiento en miles de hogares en Puerto Rico.

Actualmente, se estima que hay más de 130,000 sistemas de energía solar interconectados a la red eléctrica, lo que reafirma un impulso significativo hacia alternativas de energía sostenible especialmente durante los últimos años. Este incremento en la instalación de placas solares se ha dado en gran medida por los incentivos, subvenciones y programas respaldados por los fondos federales de recuperación CDBG-DR y CDBG-MIT, que administra el Departamento de la Vivienda de Puerto Rico.

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Es evidente la fragilidad e inestabilidad del servicio eléctrico de Puerto Rico, servicio que es crucial no solo para la vida cotidiana de los puertorriqueños, sino también para el desarrollo económico. Por tanto, el buen funcionamiento y mantenimiento de los sistemas de energía solar son fundamentales para garantizar la resiliencia energética y la calidad de vida de la población.

Consultamos con Irvin Cruz, ingeniero electricista e instalador certificado de sistemas de energía solar, sobre los aspectos a considerar para el uso óptimo y mantenimiento de los sistemas de energía solar y éste nos indicó lo siguiente:

Limpieza y mantenimiento

Los expertos aconsejan limpiar las placas solares al menos dos veces al año para evitar la acumulación de hojas, polvo y otros residuos. “Recomendamos un mínimo de dos limpiezas anuales, aunque esto puede variar según las condiciones del entorno. Por ejemplo, una casa cercana a vías de alto tráfico está más expuesta al hollín. También es importante estar atentos a las áreas húmedas, que pueden ser más propensas al crecimiento de hongos”, nos comenta Cruz. “Lo ideal es que esta limpieza la realice un profesional para evitar emergencias o accidentes”, alertó.

Además, el ingeniero electricista sugiere realizar un mantenimiento profundo anual, o cada dos años, para verificar la tornillería y los anclajes. “Con el tiempo, el viento y los movimientos telúricos pueden aflojar algunos anclajes o los tornillos. Por eso, es aconsejable hacer evaluaciones visuales y verificaciones periódicas para ajustar el torque y asegurarse de que el cableado eléctrico esté en buenas condiciones”, nos explica Cruz.

Ilustración mantenimiento de sistema solar

Ilustración limpieza y mantenimiento de sistema de energía solar

Monitoreo del funcionamiento del sistema y ciclo de facturación

Conocer si su sistema de placas solares está funcionando de manera óptima es esencial. “A menudo, las personas adquieren un sistema de energía solar, pero luego instalan equipos adicionales sin considerar el aumento en el consumo”, dice Cruz. “Es fundamental mantener un consumo consciente y asegurarse de que la producción de energía del sistema cubra las necesidades”.

Para evaluar si su nivel de consumo es adecuado, revise detenidamente su factura mensual y observe cuánta energía eléctrica utiliza su hogar. “Si nota un aumento drástico en su factura, podría ser que las placas solares no estén rindiendo lo suficiente. Verifique que los paneles no estén sucios y que no haya obstáculos, ni sombras que bloqueen la entrada de la luz solar a los paneles. “A veces, un árbol que era pequeño puede crecer y obstruir la luz. Pero, si por otro lado observa que su consumo regular ha aumentado, y no es el consumo para el cual el sistema fue diseñado, considere aumentar el número de placas solares”, señala Cruz.

Ilustración monitoreo de factura

Ilustración de monitoreo de factura

Precauciones

Los sistemas de energía solar utilizan baterías para el almacenamiento. La gran cantidad de energía que fluye por el sistema puede ser peligrosa, por lo que hay que ser cautelosos. “La mayoría de las baterías en el mercado son de litio, y para este tipo de equipo se recomienda la atención de un experto en su manejo”, explica Cruz.

El ingeniero electricista señala además que es crucial ser precavido antes, durante y después de una tormenta o fenómeno atmosférico. “Haga una inspección antes de la tormenta para asegurarse de que todo esté correctamente ajustado. Los sistemas de placas solares están diseñados para soportar vientos de hasta 180 millas por hora, siempre que estén bien instalados. Por eso, como parte de los preparativos, haga revisar la cablería y los anclajes”, indica.

Cruz, añadió que, es recomendable apagar el consumo desde el sistema durante un evento climático para conservar la mayor cantidad de energía posible en las baterías. “Justo después de estos fenómenos, suele haber menos luz solar afuera y el consumo adentro del hogar tiende aumentar. Esto, puede sorprender a muchos al darse cuenta de que tienen menos energía acumulada de lo que pensaban.”

Por eso, es importante familiarizarse con las pantallas de lectura de las aplicaciones provistas por el instalador y conocer las alertas del equipo para así saber si podrá cubrir sus necesidades energéticas tras la emergencia. Igualmente, evita compartir extensiones eléctricas, pues: “de buena fe compartes tu energía, pero en realidad desconoces el uso que le esté dando tu vecino, lo que puede provocar sobrecargas a tu sistema, el cual no fue diseñado en su origen para hacer eso”, culmina el instalador certificado en sistemas de energía solar.

¡Cuida tus placas solares y asegura la energía de tu hogar!

El uso adecuado de las placas y baterías garantiza la energía necesaria para una mejor calidad de vida y es fundamental para construir un futuro energético sostenible para Puerto Rico.