Miriam Pérez, propietaria de Mimi’s Sweets, nos cuenta su historia.
A Miriam Pérez siempre le han gustado los desafíos. Su curiosidad por la repostería, las recetas difíciles y el recuerdo de los momentos dulces de la vida, la encaminaron inevitablemente hacia el mundo de los ‘French macarons’.
“Mis primeros recuerdos en la cocina son con mi abuela. De ella aprendí a hacer las recetas difíciles de la familia, a hornear siguiendo instrucciones y siendo consistente para que todo quede bien.”, comenta Miriam desde su mesa de trabajo, mientras decora con atención una orden especial de macarons de vainilla y fresas para una primera comunión.
Fue su familia y su afán de salir hacia adelante lo que la impulsó a crear su propia empresa, Mimi’s Sweets. “El macaron francés siempre me daba curiosidad porque confeccionarlos es bien delicado y complicado. Hay que tener control no solo de las medidas, sino de la técnica y la temperatura, pero sobre todo de la humedad del ambiente, algo que en Puerto Rico puede ser difícil.”, explica Miriam, o Mimi, como cariñosamente también le llama su familia. “Fallé un montón de veces; lloré, me frustré, pero no me rendí. Hasta que un buen día encontré el punto perfecto y perfeccioné la receta.”, recuerda sobre sus inicios.
Hoy, luego de dos años de intenso trabajo y compromiso, la madre de dos niños varones de 10 y 11 años es toda una experta en el arte de los macarons, una dulce galleta de confitería al estilo francés, crujiente por fuera, pero suave por dentro, cuya receta básica consiste en mezclar con aire claras de huevo, harina de almendras y azúcar refinada bien cernidas, con esencia de almendras.
Cuenta Mimi que, fue una amiga quien primero le habló sobre el Programa de Capacitación Empresarial del Centro para Puerto Rico, Sila María Calderón, subrecipiente del Programa de Incubadoras y Aceleradoras de Pequeñas Empresas (SBIA), bajo los fondos de recuperación CDBG-DR que administra el Departamento de la Vivienda. De esa experiencia, dice, atesora los conocimientos que recibió de parte del grupo de mentores y asesores, quienes por dos meses y medio le brindaron capacitación en temas variados: desde el manejo de emociones, hasta conceptos de contabilidad, permisos, registro de marca comercial, plan de negocio, plan de mercadeo y manejo de redes sociales. “Los cursos eran una vez a la semana; comenzamos en octubre, terminamos en diciembre 2023 y recientemente nos graduamos.”, expresó sobre su experiencia.
Ahora, habiendo dominado la receta y los conceptos empresariales necesarios, busca llevar su negocio a un próximo nivel. “Con esta capacitación del Centro para Puerto Rico quería explorar ese otro lado de mí: el lado empresarial. También, quiero enseñarles a mis hijos que no importa lo difícil de las circunstancias nada es imposible y que se puede salir hacia adelante con esfuerzo y dedicación.”, enfatizó.
Mimi’s Sweets cuenta con 37 sabores diferentes de macarons, entre ellos, vainilla, frambuesa, nutella, fresa, coco, piña, café, almendra, pistacho, piña colada, entre muchas otras combinaciones interesantes para complacer el gusto de los clientes más exigentes. Su producto puede ser personalizado, según la ocasión. Los clientes pueden pedir órdenes por docena para eventos especiales como bodas, quinceañeros, “baby showers”, cumpleaños, aniversarios o con logos corporativos. Inclusive, continúa innovando y ofrece una versión especial de macarons veganos, donde sustituye el huevo por aquafaba de garbanzos.
“En el futuro me veo con mi propio negocio, un espacio donde las personas puedan disfrutar de una experiencia diferente, que cuando lleguen y se deleiten con mis macarons se sientan que están disfrutando y se olviden de cualquier situación difícil que les haya ocurrido durante el día.”, dice Miriam mientras admira el fruto de su trabajo, confeccionado por sus propias manos.
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